Cuidar las cerraduras y mantenerlas en buen estado es muy importante para que funcionen correctamente, puesto que es una parte esencial para la seguridad de tu hogar o comercio. ¿Sabías que con unos simples hábitos puedes alargar la vida útil de tus cerraduras y evitar costosas averías?. Por ello queremos enseñarte que cuidados y mantenimiento necesitan.
Hábitos para alargar su vida útil de una cerradura
Un buen hábito para alargar la vida útil de una cerradura es cuidarla adecuadamente. Una cerradura es un elemento de seguridad que nos protege de robos, intrusiones y otros riesgos. Por eso, es importante mantenerla en buen estado y evitar que se deteriore o se averíe.
Al adoptar un enfoque proactivo, no sólo prolongará la eficacia de su cerradura, sino también evitará costosos e inoportunos inconvenientes. Ya sea que se trate de una cerradura de casa, oficina, o vehículo, estas prácticas sencillas pero potentes pueden iniciar una cadena de cambios beneficiosos.
Adéntrate en este conocimientos y descubre cómo aprovechar al máximo la durabilidad de tu cerradura hoy mismo. Con la información aportada por nosotros convertirás el mantenimiento de tu cerradura en una tarea simplificada y libre de preocupaciones en poco tiempo. Presta atención a las siguientes sugerencias para fortalecer la durabilidad de tu cerradura, asegurándote una seguridad sostenible e irrefutable.
¿Cómo cuidar las cerraduras de factores que pueden dañarla?
1. La importancia de lubricar periódicamente
Uno de los principales consejos es lubricar de forma periódica los componentes móviles de la cerradura, como el pestillo y el bombín. Esto ayuda a que se deslice con suavidad y evita el desgaste prematuro.
Te recomendamos usar un lubricante en spray diseñado específicamente para cerraduras. Aplícalo introduciendo la boquilla en la ranura y rocía una pequeña cantidad. Después abre y cierra la cerradura varias veces para extender bien el producto. Haz esto cada 6 meses o con más frecuencia si vives en un sitio con mucho polvo o salitre. Así mantendrás tus cerraduras bien engrasadas y funcionando sin problemas.
2. Limpieza periódica para eliminar suciedad
Además de lubricar, es esencial limpiar la cerradura de forma regular para eliminar la suciedad y residuos que se acumulan con el uso.
Deberías usar un paño seco para retirar el polvo superficial. Luego puedes pasar un bastoncillo de algodón humedecido en alcohol para eliminar la grasa y mugre más incrustada.
Ten cuidado de no derramar líquido dentro de la cerradura, solo humedece ligeramente el algodón. Cuando termines, introduces la llave y gírala varias veces para verificar que todo funciona correctamente. Con una limpieza cada 2 o 3 meses evitarás que la suciedad perjudique el mecanismo interno de tus cerraduras.
3. Protege contra condiciones ambientales adversas
Factores como la humedad, salitre y cambios de temperatura pueden acelerar el deterioro de las cerraduras. Para protegerlas debes tomar algunas precauciones.
Si tu casa está cerca del mar, instala protectores contra la brisa salina. También puedes aplicar una fina capa de vaselina para crear una barrera protectora temporal.
En climas muy húmedos o fríos, evita que se forme condensación secando cualquier rastro de agua y utilizando deshumidificadores. Así impedirás la corrosión y el congelamiento de los mecanismos internos.
Con estos tips protegerás tus cerraduras de la acción destructiva del ambiente y alargarás considerablemente su vida útil.


4. Revisa periódicamente el estado de los tornillos
Los tornillos que sujetan la cerradura a la puerta tienden a aflojarse con el uso constante. Revisar su estado y ajustarlos periódicamente es fundamental. Comprueba que estén bien apretados cada 3 o 4 meses, y utiliza una llave de tuercas para ajustar los que estén sueltos. También revisa que no falte ninguno.
Si detectas tornillos faltantes o deteriorados es mejor reemplazarlos por unos nuevos. Te recomendamos que llames a un profesional para realizar esta tarea; si te encuentras en la Comunidad de Madrid, no dudes en contactar con Tu Cerrajero Madrid, pues nos encargaremos de escoger el tipo y tamaño correcto según tu cerradura, para que no te tengas que preocupar de este paso y estar totalmente tranquilo de la decisión tomada.
Beneficios de cuidar una cerradura
- Ahorro de dinero: Al evitar que la cerradura se dañe, nos ahorramos el coste de tener que repararla o sustituirla por una nueva. Además, al mantener la cerradura funcionando correctamente, evitamos posibles daños en la puerta o el marco que podrían requerir una obra mayor.
- Mayor seguridad: Una cerradura bien cuidada ofrece una mayor resistencia frente a los intentos de forzarla o manipularla. Así, nos aseguramos de que nuestra puerta sea más difícil de abrir por intrusos y que nuestros bienes y nuestra intimidad estén más protegidos.
- Menos problemas: Al cuidar la cerradura, evitamos que se atasque, se bloquee o se rompa. De esta forma, podemos abrir y cerrar la puerta con facilidad y sin contratiempos. Asimismo, al prevenir las averías, reducimos el riesgo de quedarnos encerrados dentro o fuera de nuestra vivienda u oficina.
¿Cuándo llamar a un cerrajero profesional?
A pesar de tus cuidados preventivos, con el tiempo las cerraduras se desgastan y pueden presentar averías. Si notas problemas en su funcionamiento, ruidos anormales o dificultad para girar la llave, es hora de llamar a un cerrajero profesional.
En Tu Cerrajero Madrid estamos capacitados para diagnosticar el problema y reparar o cambiar las piezas dañadas si es necesario. No intentes forzar o reparar la cerradura por tu cuenta, puedes empeorar el daño. Contar con nuestro servicio te aseguraremos una reparación efectiva para recuperar el buen funcionamiento de tu cerradura. También podemos asesorarte sobre cómo mejorar la seguridad.
Así que ya lo sabes, con unos sencillos hábitos de mantenimiento y limpieza podrás disfrutar de tus cerraduras en perfecto estado por más tiempo. Pon en práctica estos tips y olvídate de averías costosas o cerraduras que dejan de funcionar.
¡Tu seguridad y tranquilidad lo valen!